El Grupo Parlamentario Socialista ha llevado este jueves a al Pleno una propuesta de impulso en la que solicitaba a la Junta de Extremadura a extender el Programa de Colaboración Económica Municipal del Servicio Respiro Familiar a todos los municipios de Extremadura, una iniciativa que ha sido rechazada con los votos en contra del PP y VOX.
La encargada de defender la propuesta ha sido la portavoz de dependencia del Grupo Parlamentario socialista, Nayara Basilio, quien ha criticado que “la señora Guardiola ha excluido de este programa de forma totalmente discriminatoria al 30 por ciento de la población extremeña que se concentra en las poblaciones inferiores de 4.000 habitantes, unos 300.000 habitantes de nuestra región.”
“¿Porque han hecho eso; es que estos extremeños y extremeñas no tienen el mismo derecho a un descanso en el cuidado de sus familiares?” se ha cuestionado, al tiempo que ha asegurado que decisión discrimina a los ciudadanos más vulnerables por su lugar de residencia «por vivir en localidades de menos de 4.000 habitantes, precisamente en las que la población está más envejecida».
Basilio ha subrayado que María Guardiola ataca frontalmente de este modo al mundo rural y ha considerado que estas decisiones políticas “se lo ponen aun mas difícil a los pueblos que luchan para no quedarse vacíos”, además de considerar que el gobierno no está teniendo en cuenta que estos pueblos son precisamente los que mayor tasa de envejecimiento tienen y los que cuentan con menos recursos.
La diputada socialista ha estimado además que la cuantía de 1 millón de euros que la Junta destina a este programa es escasa y ha lamentado asimismo que en su aplicación se mezclen los conceptos de discapacidad y dependencia.
Además, la portavoz de dependencia del Grupo Parlamentario Socialista ha afeado que el gobierno de María Guardiola haya intentado hacer creer a los ciudadanos que su grupo no estaba de acuerdo con este programa.
En este sentido, ha incidido en que los socialistas han pretendido con sus críticas que la Junta escuchase, dialogase y recapacitase, ya que «con prisas, sin diálogo social y sin empatía no se hace nada bueno por la discapacidad y por la dependencia».
Ha explicado en este punto que los socialistas no niegan que el objetivo que persigue este programa sea positivo, pero ha considerado “que hay cuestiones en las que la Junta se ha equivocado y mucho, ya que debería hablar de las personas dependientes, de las personas con discapacidad y, sobre todo, de las necesidades de descanso de las familias que se dedican al cuidado”.
Así, ha asegurado que la Junta de Extremadura no ha mantenido «el espeto que se merece el diálogo social» y a afirmado que María Guardiola ha preferido jugar a los «experimentos sociales con personas con discapacidad y con dependencia». «Y esto no funciona así, ya que la Junta, ni puede ni debe usar el método ensayo-error con las personas más vulnerables», ha remarcado.
Entre las peticiones que recogía la propuesta se encontraba aumentar la dotación económica para dar cobertura a las personas que residen en los municipios de menos de 4.000 habitantes y a devolver el servicio de asistencia en establecimiento externo no sociosanitario al modelo anterior para que siga siendo prestado por entidades del Tercer Sector.
En este sentido, Basilio ha defendido que las entidades del sector de la Discapacidad solo y exclusivamente tienen en sus plantillas trabajadores profesionales totalmente cualificados, argumento que ha servido para rechazar una enmienda de modificación del Grupo Parlamentario VOX y con la que mostraba la posición favorable de su grupo a las dos primeras peticiones socialistas pero no volver al modelo anterior.
Basilio les ha preguntado a los diputados de la ultraderecha si dudan de la capacitación y la profesionalidad de los trabajadores y trabajadoras de las entidades del sector de la discapacidad. “¿No creerán ustedes que esto también son chiringuitos, que la labor que desarrollan es prescindible?”, les ha afeado.
