Valentín García se ha referido este martes en una rueda de prensa al anuncio realizado «a bombo y platillo» este pasado lunes por parte de la vicepresidenta extremeña, Cristina Teniente, en relación con la puesta en marcha de una nueva edición del Plan de Experiencia, un programa de contratación municipal sufragado con fondos públicos.
Según el portavoz socialista, lo que Teniente «no dijo a los ciudadanos es que el Plan de Experiencia del año 2012 lo van a acabar de pagar en el año 2014». Siguiendo esta máxima, ha indicado García, las haciendas locales que se acojan al programa este año no recibirán el último pago antes de comienzos de 2015.
De esta forma, los municipios adelantan la financiación del programa y le «difieren» el pago durante dos años, y durante este periodo «le están financiando el déficit al señor Monago», ha explicado García.
«Quienes realmente asumen el mayor volumen de coste del empleo de experiencia son los ayuntamientos de Extremadura. La Junta, lo que hace, es lo que en el PP tanto se lleva ahora, que es la simulación y el diferido», ha subrayado García, al tiempo que ha añadido que «hacen una simulación de contratación de empleados, pero en el pago a los ayuntamientos se lo hacen como el despido de Bárcenas, en diferido, con pagos en 2012, 2013 y 2014».
«GRAN ESFUERZO» DE LOS AYUNTAMIENTOS
En este sentido, el portavoz socialista se ha preguntado si «la Junta cree que la situación de las haciendas locales están para sufrir un quebranto como al que les obliga si quieren dar respuesta al desempleo en sus localidades».
«Los alcaldes comprometidos con el desempleo tendrán que hacer un gran esfuerzo si quieren solicitar contratos del Plan de Experiencia», puesto que «tendrán que adelantar la financiación y la Junta le diferirá el pago de esos programas del Plan hasta el año 2014 y el 2015», ha señalado García.
Por último, ha comentado que el Gobierno de Extremadura «dirá que son los campeones en cumplir con el déficit», pero «al final quien subvenciona el déficit de la Junta son los ayuntamientos, o los ciudadanos con el copago, o las empresas que no reciben el pago correspondiente como proveedores de la Administración. La administración no le paga a nadie», ha concluido.