No obstante, todo lo que venga a paliar los sufrimientos de la gente es bienvenido pero, desde hace tiempo el PSOE ha reclamado que se atiendan las urgencias ya que hay gente que pasa hambre.
En Extremadura hay personas que no pueden encender la calefacción, a las que se les corta el suministro eléctrico y a las que se les desahucia de sus viviendas.
Hay que diferenciar entre la atención a la emergencia y la atención a la urgencia, y que hay unas 70.000 personas sin prestaciones sociales, unas 60.000 familias con todos sus miembros en paro y unos 50.000 desempleados más que hace dos años y medio.
Esto no ha venido llovido del cielo sino a consecuencia de unas políticas determinadas.