El secretario de Educación del PSOE de Extremadura, José María Sánchez, advierte que abundan los universitarios que ni siquiera han recibido, a escasas semanas de finalizar el presente curso las cuantías destinadas a residencia, un montante que asciende a 1.500 euros.
A todo esto se suma la falta de transparencia por parte del ministerio en la concesión de la denominada parte variable de la beca y es que lo más gravoso de la actual situación es que los más perjudicados son los que tienen un nivel de rentas más bajo, lo contrario de lo que un gobierno equitativo debía hacer.
Los alumnos no han recibido en su Resolución de Beca ninguna justificación a la asignación de cuantías ni datos concretos, con lo que resulta inviable, según Sánchez, presentar ninguna reclamación, ya que no tienen base en la que sustentarse.
El PSOE de Extremadura se une a la desesperación de las familias a las que les resulta materialmente imposible mantener a sus hijos en la Universidad, a pesar de que éstos estén sacando buenas notas. Los socialistas recuerdan que la media de las cuantías con la derecha en el gobierno se han reducido en más de 1.000 euros.
Así mismo, desde el PSOE de Extremadura se solicita que se tengan en cuenta todas estas dificultades y el borrador que se presente por parte del Gobierno recoja algunas de las reivindicaciones de rectores y alumnado. Se exige un aumento de cuantías, transparencia en las concesiones, rebaja en el número de créditos necesarios para no tener que devolver las becas, y otros asuntos que están ahogando a la Universidad Pública.
Los socialistas extremeños se oponen al decreto presentado apelando, como casi todos los involucrados en el tema educativo, al papel igualador de oportunidades y de apoyo a los menos favorecidos que ha de presidir el Decreto de Becas. No puede ser que, por cuestiones exclusivamente económicas, haya alumnos que puedan estudiar con un 5 y otros que necesiten 6,5 y que a unos no se les exija ningún número concreto de créditos superados para seguir manteniéndose en las aulas universitarias ya que cuentan con el apoyo económico de sus padres mientras los otros están siempre pendientes de esa espada de Damocles.
Asegura Sánchez que el PSOE seguirá peleando porque la universidad pública española sea una universidad de calidad y busque la excelencia, pero con igualdad de oportunidades para todos independientemente de su posición económica o su lugar de nacimiento. Los valores democráticos deben presidir las aulas y las rectorías.
