Según informan los socialistas del Congreso, lo que se discutía era si los Estados miembros deberían tener más competencias en relación a la Unión europea en materia de fabricación, presentación y venta de los productos del tabaco. Así, mientras que el Grupo Parlamentario Socialista en el Congreso de los diputados ha votado para que España tuviera más competencias, con lo que ayudaría al tabaco y a los productores extremeños, el Partido Popular ha votado para que la U.E. tenga las competencias en esa materia, posicionándose en contra de lo que viene manifestando Monago y el partido Popular de Extremadura.
Los representantes socialistas en el Congreso de los Diputados han señalado mientras el Consejero de Agricultura del Gobierno de Extremadura, José Antonio Echavarri dice una cosa en Bruselas, el Partido Popular de España dice la contraria, poniendo de manifiesto que Monago y su gobierno no pintan nada en las decisiones que sobre el tabaco toman en Madrid.
En la reunión de la Comisión Mixta, el Grupo Parlamentario Socialista del Congreso ha subrayado la importancia económica del sector del tabaco, el empleo que crea y los ingresos públicos que genera han sido citados, poniendo expresamente sobre la mesa el caso de Extremadura ( 22.000 familias, 3.000 productores…). Así mismo, los socialistas han señalado que el tabaco es el sector más regulado de los agrícolas, por tanto, la afectación que tiene este tipo de normas sobre el sector y las zonas productoras es enorme.
Por tanto, los socialistas consideran que la propuesta de Directiva viola los principios de subsidiariedad y proporcionalidad y se va a oponer a su tramitación, porque considera que los objetivos de salud pueden ser conseguidos perfectamente por los estados, por cada Estado, sin que la normativa europea deba profundizar tanto que no permita margen para las perspectivas diferentes de los estados. De hecho, también se oponen el Gobierno de Canarias, y los parlamentos nacionales de Italia y República Checa.
Para finalizar, los socialistas opinan que el Partido popular no se pone de acuerdo entre lo que defienden en Madrid y lo que defienden en Extremadura, imponiéndose evidentemente las posiciones de Madrid frente a los intereses del tabaco extremeño.